En la Constitución del 1978, se redactaron en el artículo 27, un conjunto de principios sobre el sistema educativo que los distintos Gobiernos democrático han ido llevando a cabo desde entonces, por lo que toda decisión ha de estar dentro de dichos principios.
Todos los centros escolares españoles, dentro del ámbito educativo, deben seguir dichos principios marcados por el Gobierno, que a lo largo de los años ha ido cambiando en su dirección, ya que en un principio, fue Adolfo Suárez, miembro de la UCT (Unión de Centro Democrático), el primer presidente de España, hasta 1981; después, pasó a ser Leopoldo Calvo-Sotelo (UGT), el segundo presidente de España, aunque tan sólo presidió un año, y fue sustituido por Felipe González, miembro del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), tercer presidente de España, que presidió el Gobierno desde 1982 hasta el 1996. José María Aznar, cuarto presidente, fue su sucesor en el Gobierno desde el 1996 hasta el 2004, y por último, José Luis Rodríguez Zapatero (PSOE), quinto presidente del Gobierno español, y es el actual presidente.
Lo que quiero expresar con esto, es que todos estos diferentes partidos, ya sean de unas ideologías o de otras, esté o no de acuerdo con los principios señalados en la Constitución del 1978, han seguido sus pautas y han intentado mejorar la situación de los ciudadanos españoles, creando así nuevas medidas que favorezcan la igualdad y la libertad de expresión.
Durante estos años, se ha conseguido un importante avance en la educación de nuestro país. Se ha conseguido la plena escolarización en la enseñanza obligatoria, de 3 a 16 años, y tasas de escolarización elevadas en el Bachillerato, en la Formación Profesional y en la Universidad. Y ahora lo que se pretende es lograr que la escolarización obligatoria sea de 0 a 18 años.
Es necesario incrementar el número de jóvenes que obtengan el título de graduado en educación secundaria, el número de jóvenes que continúan su formación en la educación postobligatoria, y especialmente en la formación profesional de grado medio, ya que los jóvenes para disponer de la formación necesaria para su desarrollo personal y profesional, necesitan estudiar e instruirse, y también lo necesita España, para así poder orientar nuestro modelo de crecimiento económico y alcanzar un alto nivel de bienestar social.
Pero para ello, es importante que el Gobierno adopte unas determinadas medidas, para hacer que nuestro sistema educativo mantenga una estabilidad, y también que el trabajo del Ministerio de Educación y de las Administraciones educativas de las diferentes Comunidades Autónomas sea conjunto, y para que esto ocurra, se debe llevar a cabo un gran pacto social y político, que defienda la educación.
El Pacto educativo requiere de una implicación colectiva, y de unas responsabilidades concretas, en función de las competencias, atribuciones y capacidades de cada sector, haciendo especial hincapié en la responsabilidad de las administraciones educativa, ya que al fin de cuentas son estas las que han de responder ante los ciudadanos. Se trata, por lo tanto, de construir un marco educativo común y acordado, y en el que se describan con claridad los objetivos educativos que se pretenden, para conseguir los principios de equidad y excelencia, y para así mejorar nuestros resultados educativos.
Ha sido un pacto creado por el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), e iniciado principalmente por Ángel Gabilondo, que afirma que en él no se muestra ninguna inclinación política, por lo que no debería de provocar oposiciones, ya que no se trata de un pacto socialista, sino de un pacto conjunto por la Educación en España, y donde se pretende que todos los partidos políticos lleguen a una acuerdo. Sin embargo, la intención de que todos formen parte de dicho acuerdo, se está viendo desfavorecida, ya que partidos como el PP, PNV, BNG, etc. se niegan a dicho pacto.
Para llevar a cabo un Pacto Educativo eficaz, debe de establecerse una mayor implicación de la sociedad en dicho acuerdo, ya que le participación de todos los sectores es imprescindible para este. Debe de llegarse a un entendimiento entre los diferentes partidos, para que así se puedan fijar los principios de este pacto; y por último, el acompañamiento de todos y cada uno de los implicados es fundamental, como anteriormente he mencionado. Por lo tanto, se espera la intervención de las administraciones educativas, de los partidos políticos (fundamental, bajo mi punto de vista, ya que al final son ellos los que imponen las leyes), los agentes sociales (que pueden orientar para potenciar la educación de las personas con más problemas), las comunidades educativas, las familias (que son el pilar básico de cada niño y el que le aporta unos principios básicos en la educación), y como no, los propios alumnos (que deben aportar sus ideas y creencias para mejorar la calidad de la educación).
La calidad de este pacto es la preocupación que todos y cada uno de los sectores tienen, ya que si se vuelve a fracasar en la educación, el futuro de todos los españoles se verá afectado, ya que dicho pacto pretende hacer que la educación esté más vigente en los jóvenes, que estudien cada vez más personas, y España se convierta en una potencia cultural y económica importante, por lo menos para que podamos salir de la crisis que actualmente todos estamos viviendo. Por lo que no sólo muestra su interés por la educación, sino también por el desarrollo y la evolución de nuestro país, ya que si hay más personas que tengan una buena formación y cualificación, se llevará a cabo una mejora social y económica, favoreciendo así el crecimiento del Estado.
En el siglo XXI, el sistema educativo vigente debe de tener presente la diversidad y las capacidades que cada persona posee, por lo que ha de ser de todos y para todos. Y por ello, el pacto pretende hacer que este nuevo acuerdo tenga una clara intención integradora de todos los ciudadanos, sin importar la cultura, la raza, la lengua o cualquier otro factor. Cualquier posicionamiento que se distancie de esta realidad social estaría abocado a la incomprensión de los ciudadanos.
La cultura del trabajo y el esfuerzo son valores en los que es preciso insistir. Los diferentes niveles educativos beben enseñar a los alumnos la cultura del trabajo y del esfuerzo, y hacer que tomen conciencia de la importancia, de la necesidad y de su indiscutible reflejo en los resultados finales, de dichas culturas. Aunque el esfuerzo del alumnado es un requisito que es necesario, pues no es suficiente, ya que también es imprescindible el esfuerzo de todos los agentes que intervienen en la educación de los más jóvenes, como son los docentes, los centros, las administraciones, etc., que pretenden conseguir la aplicación de unos objetivos educativos efectivos. Por lo tanto, en dicho pacto, se debe tener como el centro de atención al alumnado, a las familias de estos y sobre todo al profesorado, ya que si no se tuvieran en cuenta, nada de lo planteado sería posible.
El objetivo más importante de este Pacto es, mejorar el nivel de la enseñanza de los ciudadanos, tanto de los jóvenes como de la población adulta. Los puntos planteados por el PSOE, han sido planteados con la intención de fomentar la equidad y la excelencia, ya que son los dos aspectos que necesarios para conseguir una verdadera educación de calidad.
Las causas que han dado lugar a plantear un nuevo Pacto Educativo han sido, en primer lugar, la necesidad de que se eduque a los jóvenes para que no finalicen la educación obligatoria, ya que si dejan de instruirse, estos no tendrán los aprendizajes más básicos para su desarrollo personal y profesional, y no podrán adquirir las competencias necesarias para su función social. Y en segundo lugar, la falta de motivación de los alumnos, por lo que se pretende fomentar la excelencia en todos los cursos, para que así tengan una mayor capacidad para aprender.
Los puntos que se presentan en este pacto parten del último informe de la OCDE, de los informes del Consejo Escolar del Estado y de los informes de los Consejos Escolares de las CCAA, donde se tienen en cuenta las competencias del Ministerio de Educación y de las administraciones educativas de las Comunidades Autónomas, y también la participación e implicación de los distintos sectores de la comunidad educativa, además de otras instituciones y agentes sociales.
La intención es unir el ámbito político y social, para así continuar mejorando la calidad de nuestra educación, lo que requiere superar las debilidades existentes y afrontar los nuevos retos de la sociedad del siglo XXI, la del conocimiento. Para saber adaptarse a los acontecimientos que se dan en nuestra sociedad hoy en día, es imprescindible realizar algunas reformas en nuestro sistema educativo, por lo que se deben fijar unos objetivos específico que respondan a las necesidades de los jóvenes y de la población adulta, y disponer de los instrumentos necesarios para su desarrollo personal y profesional.
Se piensa que sólo el 15% de los empleos serán para personas sin ninguna formación, por lo tanto, el 85% restante se refiere a aquellas personas que tengan una formación, ya sea una formación profesional de grado medio o de bachillerato.
El Pacto Educativo ha elaborado una serie de objetivos que se establecen de manera decisiva hasta nueva orden, ya que aún hay desacuerdos entre los partidos, por lo que no son decisivos todavía.
El primero de ellos afirma que todos los estudiantes tienen que finalizar la educación obligatoria para adquirir los conocimientos, las competencias básicas y los valores necesarios para su desarrollo personal y profesional, y para su continuidad en los estudios posteriores.
Con el segundo de los objetivos, se pretende alcanzar una tasa de graduación más elevada a la que actualmente hay en los estudios postobligatorios, formación profesional de grado medio o de bachillerato, por lo que se pretende llegar al 85% de los alumnos, pero sobre todo conseguir un incremento del alumnado en la formación profesional de grado medio. El tercer objetivo es introducir las tecnologías en las aulas, como instrumentos de trabajo para las diferentes áreas de conocimiento.
Se pretende promover un conjunto de medidas en el ámbito escolar y social para garantizar que todos los jóvenes hablen y entiendan correctamente un idioma extranjero, especialmente el inglés; este es el cuarto objetivo. Mientras que el quinto, recoge la idea de adoptar las medidas necesarias para que la formación profesional inicial del sistema educativo, la formación profesional permanente y la formación para el empleo, sepan responder adecuadamente a las necesidades de los sectores productivos.
Con el sexto objetivo, se plantea la idea de educar a los alumnos dentro de unos valores, en la enseñanza universitaria, como es la excelencia, la investigación, la innovación, la transferencia del conocimiento y la difusión de la cultura científica y humanística.
Impulsar la formación y el aprendizaje a lo largo de la vida, es el principio que recoge este séptimo objetivo. Y para ello se ha planteado la adopción de medidas, que faciliten la compatibilización de la formación y el empleo, tanto en la población joven como en la adulta, que debe mejorar su aprendizaje para así, incrementar sus posibilidades de conseguir un empleo en la sociedad de hoy en día.
En este octavo objetivo, el Pacto dice que ningún estudiante debe privarse de estudiar por falta de recursos económicos, por lo que se pretende elevar los umbrales establecidos, para que así esas personas puedan tener derecho a becas y a ayudas, lo que provoca un incremento del rendimiento del alumnado. Esta medida me parece especialmente innovadora, ya que hay muchas personas que no pueden estudiar por falta de medios, y aunque las becas que se han ido dando a lo largo de los años, han sido muy numerosas, pues tampoco han sido suficientes, y por ello, todas esas personas que no han podido estudiar porque se han tenido que poner a trabajar, pues se quedaron y se están quedando, por llamarlo de alguna forma, “en la sombra”, ya que ni tan siquiera recibían becas o ayudas.
Por otra parte, en el noveno objetivo, se pretende impulsar el acuerdo social, para que se garantice de esta forma la educación, dentro de los valores propios de una sociedad democrática, haciendo especial hincapié en las familias, en el profesorado y en los medios de comunicación. Y por último, el décimo objetivo, que pretende fomentar la Educación Inclusiva, el reconocimiento de la diversidad y la Interculturalidad, procurando así los medios y recursos adecuados para garantizar la incorporación y la integración, de manera igualitaria, de aquellos estudiantes con necesidades específicas de apoyo educativo. Con este objetivo, se debe pretender, por lo menos bajo mi punto de vista, hacer consciente a la sociedad de lo difícil que nosotros se lo estamos poniendo a aquellas personas que sufren algún tipo de deficiencia, y que por ello necesitan un apoyo dentro del sistema educativo, y en muchos casos, también dentro del laboral. La sociedad no se pone en su lugar y los ridiculiza por ser diferentes y especiales, y ese es el mayor error que la sociedad de hoy en día comete, y estamos cometiendo. Se debe educar a los más pequeños para concienciarles de que todos somos iguales, dentro del principio de Igualdad, y que todos somos personas, y debemos respetarnos como tal, principio de Humanidad, ya que en la mayoría de las ocasiones, son los propios niños, los que de manera inconsciente, hacen daño a aquellos que más necesitan su apoyo, y eso indudablemente, es un fallo que cometen los padres en la educación de sus hijos.
Con este Pacto, se han llevado a cabo unas propuestas educativas para las diferentes etapas por la que los alumnos deben pasar: la educación infantil, la educación obligatoria, dentro de la cual se encuentra la enseñanza primaria y la secundaria, y por último, el bachillerato.
En España la mayoría de los niños de tres a seis años, están escolarizados en el segundo ciclo de Educación Infantil, ya que tiene es gratuito, mientras que en el primer ciclo, de cero a tres años, los padres deben pagar guarderías para que cuiden de sus hijos, y estas son muy caras, por lo que pocas familias son las que escolarizan a sus hijos en esta. Y es, en esta etapa, en la que se han centrado para proponer una mejora. Por lo tanto, se les debe dar a las familias una oferta educativa de calidad. Se ha propuesto también una ampliación del Plan de Educación del Ministerio y de las Comunidades Autónomas, para así incrementar las ofertas en las plazas, y la utilización de medidas para garantizar que esta etapa sea considerada como un nivel educativo.
Cada Comunidad Autónoma deberá llegar a acuerdos políticos y sociales para así poder aumentar la oferta de plazas en los centros, lo que supondrá una mejora significativa en la evolución escolar del alumnado posteriormente. Se intentarán, por una parte, detectar de manera temprana las necesidades de apoyo educativo en las aulas, especialmente de los alumnos con alguna discapacidad, y por otra, facilitar la vida personal, familiar y laboral de todos los alumnos y favorecer el cambio, de la educación infantil al primer ciclo de primaria, con acciones coordinadas que den importancia a la participación de las familias. Y por último, cada Comunidad deberá incrementar el número de titulados asociados a la oferta de Educación Infantil, aumentando por lo tanto también la oferta de plazas en los centros con la formación correspondiente.
En cuanto a la Educación Obligatoria, en especial a la secundaria, se deberá garantizar a todos los alumnos, unas enseñanzas comunes, con el fin de adquirir las competencias básicas, y también la oportunidad de terminar la formación mediante diversificación, para aquellos alumnos que no respondan adecuadamente, con falta de motivación e interés, para que después también tengan la oportunidad de poder continuar los estudios de bachillerato o formación profesional de grado medio. Con este Pacto, se pretende aumentar el número de programas de refuerzo y de diversificación curricular, para conseguir así que los estudiantes con mayores dificultades para el aprendizaje puedan conseguir el título de Graduado Escolar, ya que este hoy en día es indispensable para poder trabajar en cualquier sitio. Y que en mi opinión, mientras más títulos se tengan mejor, porque creo que hasta en muchas ocasiones el Graduado se queda corto, por lo que me da la impresión de que el Bachillerato está teniendo más fuerza a la hora de que te den el puesto, aunque claro, eso es como todo, si por ejemplo, estoy en lista para trabajar en una tienda como dependienta, el encargado no me va a elegir a mi porque tan sólo tengo el título de Bachillerato, sino que el puesto va a ser para otro con un nivel mayor de estudios, ya sea una carrera universitaria o un ciclo de grado superior.
Las propuestas llevadas a cabo en este sector han sido, primero, que en el 4º curso de la E.S.O sea de carácter orientativo para que los alumnos decidan qué camino quieren seguir, ya sea estudiar una carrera o u ciclo de grado medio o superior. Por lo que esta orientación que los alumnos reciben, estará enfocada en dos vías, una hacia estudios generales (Bachillerato), y después de este se puede elegir si hacer una carrera y un ciclo formativo de grado superior, y la otra, es hace primero un ciclo formativo de grado medio, después poder acceder al superior, e incluso a la carrera, pero eso siempre dependerá del alumno, que en definitiva es el que decide qué hacer y qué no.
Al finalizar cualquiera la Enseñanza Secundaria Obligatoria, el alumnado obtendrá el título de Graduado Escolar, y eso será la llave para poder acceder a los ciclos formativos de grado medio o al bachillerato.
Si al finalizar el tercer curso de la E.S.O, algunos alumnos no han alcanzado el nivel de aprendizaje que se requería, y por lo tanto, no pueden acceder al curso siguiente, estos tienen la opción de repetir con la aplicación de medidas de refuerzo, o de cursar un programa de diversificación curricular, o bien, de hacer un Programa de Cualificación Profesional Inicial, el cual duraría dos años. Este programa da la oportunidad de que si el alumnado supera los módulos obligatorios y voluntarios, obtenga el título de Graduado Escolar, y si supera los módulos asociados a la cualificación profesional de nivel 1 y los complementarios, podrá acceder también, a un ciclo formativo de grado medio; mientras que aquellos que tan sólo haya superado los módulos asociados a una cualificación profesional, obtendrá un certificado de profesionalidad de nivel 1.
Cada vez son más las alternativas que se les está dando a los más jóvenes para que sigan formándose, y aún así la tasa de fracaso escolar aumenta. No creo que la culpa sea de las instituciones escolares, al revés pienso que gracias a ellas, muchas de esas personas que deciden trabajar, se lo piensan mejor y acaban estudiando, ya sea haciendo un ciclo formativo o una cualificación curricular inicial. Por ejemplo, en el instituto al que asistí hace dos años, en Aracena (Huelva), se llevan a cabo talleres de jardinería, para aquellos alumnos que no quieren estudiar. Se trata de una cualificación curricular, que dura dos años, y en la que se les enseña a trabajar con las flores y a desempeñar una labor muy requerida hoy en día por nuestra sociedad, ya que cada vez son más los jardines y patios que se construyen en las ciudades y pueblos. Les preparan para la vida laboral y estos aprenden poco a poco, que la formación profesional es importante.
A mi manera de ver, creo que gran parte de los jóvenes que deciden trabajar tempranamente, lo hacen por la falta de apoyo, de motivación, o como se quiera llamar, que la familia proporciona, ya que muchos de esos niños quieren lo que sus padres les educan, y si en tu casa sólo te hablan de trabajo y dinero, pues es lo único que un joven o una joven, puede tener en mente. La influencia, en mi opinión, recae sobre la familia.
Por otra parte, se deben definir las bases comunes de estos Programas de Cualificación Profesional Inicial para todas las Comunidades Autónomas, ya que se producen más beneficios si se ofrecen las mismas oportunidades, aunque no se pueden olvidar las características de aquellos a los que se destinan dichos programas, y del ámbito geográfico en el que se van a desarrollar.
Para prevenir las desorientaciones del alumnado en el cuarto curso de la enseñanza secundaria, el Pacto propone, que se apliquen las medidas de orientación el curso anterior, es decir, en 3º de la E.S.O, para que así los alumnos dispongan de una amplia información sobre las diferentes opciones formativas y las posibilidades de inserción laboral que estas tienen, y que una vez informados, puedan elegir la modalidad que más se ajuste a sus competencias e intereses.
Este Pacto Educativo pretende promover el éxito escolar, luchar contra el abandono escolar prematuro, y tener en cuenta la valoración del Grupo de Trabajo específico sobre las propuestas de actuaciones y las medidas eficaces, para así acabar con la desigualdad y establecer una promoción de oportunidades para la inserción social, educativa y laboral de los jóvenes en riesgo educativo.
Cada Comunidad Autónomo por lo tanto, deberá promover que su sistema educativo esté orientado a la atención individualizada, favoreciendo el esfuerzo personal de cada alumno, el espíritu de superación, la participación y el respeto, dentro y fuera del aula; elaborar una serie de actividades en las zonas de la comunidades donde más fracaso escolar haya, para que los alumnos se sientan atraídos; elaborar un programa de refuerzo de las competencias básicas a adquirir por el alumnado, para aplicarlo en el último curso de la enseñanza primaria y en los dos primeros de la secundaria; y realizar campañas de sensibilización dirigidas al alumnado y a sus familiares, para concienciarles de la importancia que tiene actualmente la formación profesional dentro del ámbito educativo, estudiar bachillerato para después acceder a una carrera, o hacer un ciclo de grado superior o medio.
Como conclusión a este apartado, he de decir que en el Pacto Educativo, se pretende hacer que la Educación Secundaria Obligatoria cumpla unos requisitos a nivel nacional, es decir que es única para todas las comunidades, pero a la misma vez es muy general, y por ello, cada Comunidad después debe elaborar sus propios criterios, adaptándose por lo tanto a las necesidades y características del alumnado y del ambiente en el que se encuentran.
Con la orientación que los alumnos reciban en el último curso de la Secundaria, el Bachillerato queda reforzado por dicha información, lo que facilitará la función del alumnado en esa nueva etapa. En mi opinión, creo que una persona bien informada, es una persona bien documentada, por lo que sabe a lo que se expone y puede maniobrar adecuadamente para resolver los planteamientos que se le presenten, mientras que si esta no conociera nada, la solución más frecuente hubiera sido la de escapar y no experimentar nuevas situaciones. Sin embargo, para obtener el título del Bachillerato, se debe tener aprobadas todas las materias que constituyan la modalidad del Bachillerato que curse cada alumno. Es decir, si un alumno está cursando ciencias puras, este debe de aprobar todas las materias que correspondan a dicho conocimiento.
Se ha planteado la posibilidad de convalidar las materias de Bachillerato y los módulos de los ciclos de formación profesional de grado medio, con el fin de que los alumnos que cambien de opción formativa, no tengan que repetir las materias aprobadas.
Según Carlos López Cortiñas (FETE- UGT), “en estos momentos hay un problema educativo, que es la enseñanza postobligatoria, ya el 31% de los alumnos no continúan en el sistema educativo, una vez finalizada la Enseñanza Secundaria Obligatoria (E.S.O)”, y en este Pacto del Gobierno, encabezado por Ángel Gabilondo, “se ha planteado la posibilidad de estudiar el Bachillerato en tres años”.
Personalmente considero que va a ser una medida que no va a aportar beneficios en la educación, ya que si ya de por sí, la gente duda en estudiar el bachiller por la razón de que son dos años más de estudios, si ahora hacen que dure un año más, aquellos que duden por su complejidad y por su duración, no van a tener ni la menor duda. Quizás para algunos sea más ventajoso este nuevo plan, ya que las materias estarán más divididas y serán más ingeribles, pero para otros es muy difícil tener que estar tres años estudiando si su problema es la falta de medios, o si no le gusta estudiar, o cualquier otro aspecto, y por desgracia cada vez son más las personas que no cursan Bachillerato, ya que lo ven como un nivel demasiado complicado, ya que este es el que le abre las puertas para selectividad, por ejemplo, otro aspecto, que también es muy temido por lo jóvenes, y digo esto, porque yo también pasé por ahí. Al principio escuchabas hablar de Bachillerato y de Selectividad y el mundo se te venía encima, era como si te hablaran de una revolución o algo así, te ponías nerviosa y te entraban escalofríos, y ahora que lo has vivido y que sabes lo que significa, y lo que realmente importa, no le das importancia, pero en ese momento sí, y por ello, creo que es muy acertada la idea de que se le den orientaciones al alumnado, ya que se debe de tratar dichos temas como algo insignificante, y no darle una gran importancia, ya que eso hace que el alumno se agobie más.
En el Documento del Ministerio de Educación aparece la posibilidad de remarcar el carácter orientativo de cuarto curso de la E.S.O, por lo que le aparecido favorecedor adoptar dicho matiz en el nuevo plan, para marcar un perfil hacia la formación profesional de ciclos formativos y otro para el Bachillerato. En mi opinión, y coincido con Carlos López Cortiñas, “eso ayuda y seguro que el profesorado considera que es una medida eficaz”.
El Pacto Educativo ha sido planteado por el PSOE, principalmente por Ángel Gabilondo (ministro de educación), y es una medida educativa que pone en el objeto de mira al profesorado, y donde se mantiene como punto importante, la jubilación voluntaria anticipada. “La sociedad en sí y las administraciones tienen un compromiso con el profesorado, que es, sacar el estatuto de la función pública docente. Es necesario algo que está siempre en el aire, y es el mantenimiento de la jubilación” (Carlos López Cortiñas, FETE- UGT).
Nicolás Fernández Guisado, miembro de ANPE, defiende que se lleve a cabo este intento por salir de la crisis, ya que este pacto ha sido elaborado también con ese objetivo. “Creemos que es necesario, ya que es un instrumento fundamental para poder introducir cambios y mejoras, sobre las reglas que acordemos establecer en nuestro sistema educativo durante los próximos veinte o veinticinco años”. “Un pacto debe servir para cambiar el modelo educativo actual. Si la LOGSE logró la Universalización de la enseñanza, el reto que tenemos pendiente es el de la calidad. En los centros es muy importante un principio para mejorar la convivencia, que es el reconocimiento de la autoridad”.
“Un verdadero pacto-estado tiene que garantizar unas enseñanzas comunes y mínimas en todas partes, y que estas se respeten, ya que eso va a hacer posible conciliar el principio de igualdad de oportunidades. Y eso afecta tanto al desarrollo de las enseñanzas, a los mínimos comunes, al derecho de las lenguas oficiales en cada comunidad, etc., como a la propia situación del profesorado, y al carácter de los cuerpos estatales, que permita la movilidad en todo el Estado”.
Se refieren a la educación y a la formación, como el eje fundamental de este nuevo Pacto Educativo, ya que son los elementos que se ven favorecidos por las conexiones laborales, el prestigio y el reconocimiento del profesorado. Los políticos de la CC.OO creen que hace falta un desarrollo profesional para la orientación de méritos, por el tema de la jubilación o de la renovación de plantilla. Pero para estos, el tema más importante y sobre todo muy actual, reside en no estar dispuestos a renunciar a la libertad de la elección de los centros por parte de los padres para escolarizar a sus hijos/as, y por lo tanto este Pacto pretende solucionar los problemas que se plantean por la falta de derechos y deberes en los centros sociales con fondos públicos, donde no hay igualdad, pero sobretodo el problema de la escolarización. Y alegan que para solucionar el fracaso escolar, es importante tener una mejora en la inversión, lo cual es lo que se ha establecido, que va a hacer mayores ayudas e inversiones dedicadas para la educación.
En el pacto se habla de la mejora por tanto, de la inversión, del reconocimiento del profesorado en la sociedad, de las medidas que se deben de tomar para mejorar el sistema educativo, y de la prevención que se debe adoptar tanto en la Educación Infantil como en la Primaria y Secundaria, para orientar al alumnado a elegir el camino adecuado.
Los profesores, por lo tanto, reclaman más autoridad en las aulas, ya que los alumnos tienen una escasa valoración del papel que estos ejercen sobre ellos mismos, o por lo menos antes era así, ya que hoy en día los alumnos tienen muchas libertades y los profesores no son capaces de controlarles, ya que este es un problema que en la gran mayoría de los casos, provienen del ámbito familiar.
Cada familia tiene características diferentes, y según sea la relación entre padres e hijos, de las ocupaciones que los padres desempeñen, del tiempo que estos pasen con sus hijos, entre otros muchos factores, el niño va a tener una conducta u otra frente al ámbito educativo. Tanto la rebeldía como la templanza se cultivan, y son los padres los que empiezan haciéndolo.
El rol del niño ha cambiado de una manera radical, debido a la excesiva protección que los padres tienen hacia los niños, a el papel de la mujer como pilar principal de la familia, que sigue muy marcado en nuestra sociedad, y donde ya hoy en día, ésta cumple también otras necesidades, como su incorporación al trabajo, lo que provoca una falta de tiempo para estar en sus hogares. Esto hace que la mujer se sienta culpable, y por eso consiente y mima a su hijo, ya que de alguna manera se piensa que esa es la forma de cubrir todo el tiempo fuera de casa, y de lo que realmente no se es consciente de que se le está educando dentro de una ausencia de límites. Y es aquí donde aparecen los problemas, ya que la escuela educa, guiándose de la educación familiar que cada niño adquiere, por lo que si un niño es mimado y consentido en su casa y no en la escuela, este no hará aquello que le manden, sino lo que él quiera en ese momento hacer. En mi opinión creo que se crea una especie de efecto- rebote en el niño, ya que por una parte en su hogar le admiten todo tipo de comportamientos, mientras que en el centro escolar al que pertenece, no deben por lo menos aceptarlo, y provoca en este una desmotivación y una frustración que descarga de manera rebelde e impulsiva, sin darle importancia a nada y queriendo siempre hacer lo que quiere, y ese es el principio de la violencia y del problema, ya que son estos niños los que terminan siendo los problemáticos y los que se dedican a distraer a sus compañeros, o por lo menos eso ocurre en la mayoría de los casos, aunque también influyen más factores sociales, económicos, culturales, etc.
Existe una competitividad de los padres a la hora de trabajar, ya que tanto los padres como las madres quieren trabajar un mayor número de horas, y así estar más tiempo fuera de casa, ya que piensan que esforzándose en el trabajo podrán prosperar en su jerarquía profesional. Pero se despreocupan por el cuidado de sus hijos, y estos se crían en casa de la abuela, o en una guardería, o en cualquier otro centro encargado de los cuidados que sus familiares no pueden darles. Están desatendidos por sus padres, y los niños sienten que estos no tienen ninguna autoridad sobre ellos, ya que no han sido enseñados por nadie, lo que provoca que no respeten ni a sus padres, ni a ninguno de sus mayores, y mucho menos a sus profesores. La juventud ha sido catalogada con despectivos que la sociedad les ha ido poniendo, en función a sus comportamientos, pero no se dan cuenta de que son ellos, los mayores los responsables de hacer que los más pequeños aprendan a comportarse, por lo que en mi opinión, creo que es mejor que se dejen de tanto opinar y criticar, y que empiecen a intentar cambiar los malos ámbitos que todos hemos ido creando en torno a la educación.
A lo largo de los años, la figura patriarcal del padre, la típica frase de las madres, “cuando venga tu padre, te vas a enterar”, está desapareciendo, y nuestras perspectivas familiares han dado un giro de casi ciento ochenta grados, ya que en numerosas familias son las madres las que trabajan fuera de casa y el padre es el que más se encarga de la educación y del cuidado de los hijos, (de bañarles, de ayudarles con los deberes, de hacerle le cena, la comida, etc.), aunque la ausencia del padre aún sigue existiendo en otras muchas familias. Nos encontramos en una sociedad muy desigual, no hay dos familias que sean iguales, y esto favorece pero también agrava algunos sectores. Por una parte me alegra que la mujer esté progresando en el ámbito laboral, pero por otra creo que en las familias modernas, que los jóvenes hemos creado, se comete el error de consentir a nuestros hijos por la culpabilidad que las madres tenemos, e incluso los padres en algunas ocasiones, al permanecer tanto tiempo fuera, y que esa es la causa de todo el fracaso escolar y social que los jóvenes de hoy en día están, o estamos, teniendo.
La formación del profesorado carece de conocimientos que ayuden a sostener la situación en el aula, cuando los alumnos no tengan actitudes de aprendizaje, como por ejemplo, controlar su respiración, y no perder los papeles, o conocer cuáles son las estrategias para captar la atención de los niños, por lo que estos deben prepararse profesional y personalmente.
Esta referencia ha sido planteada en el Plan de Bolonia, en el que se propone un aumento de la calidad en la formación de los profesores en el ámbito práctico, especialmente para aquellos que trabajan en los centros escolares destinados a los alumnos de cero a tres años, por lo que todo aquel que se dedique a la enseñanza, en especial a la infantil, debe haber estudiado Pedagogía.
A la negociación política del Pacto Educativo se le suma el debate social, ya que los padres, los alumnos y los responsables de la enseñanza concertada exponen sus argumentos sobre la necesidad de un pacto y señalan las dificultades para llegar a un acuerdo. El acuerdo de los partidos políticos está siendo muy complicado, ya que los partidos de la oposición no aceptan los principios que el Gobierno pretende establecer. Entonces, ¿se logrará establecer el Pacto Educativo? Según la Confederación Laica de Padres (CEAPA), va a depender de lo que estemos dispuestos a poner encima de la mesa, y si se trata de poner principios, pues nadie va a querer ceder lo suyos, lo que se interpreta como que ningún partido va a apoyar un proyecto que no es acorde a sus pensamientos. Y además alegan que estamos percibiendo dos cosas, por un lado, que el sistema es inestable, ya que cuando hay un cambio de gobierno, hay también un cambio de ley; y por otra parte, se pretende reducir la cifra de fracaso y de abandono escolar.
Tohil Delgado, miembro del Sindicato de estudiantes, dice “creemos que un pacto en las líneas que se están planteando con el PP, que no hay acuerdo, lejos de mejorar esta situación, lo que va a hacer es empeorarla. Así que pensamos que un pacto con las fuerzas de la izquierda, sí que sería muy necesario y muy útil”. Y estoy totalmente desacuerdo, el simple hecho de que la propuesta haya sida planteada por el PSOE, ha provocado un rechazo directo en partidos como el PP, el PNV, el BNG, la Confederación Laica de Padres, el ERC, aunque en especial el PP, que son dos partidos que desde los más remotos principios de la historia ambos partidos, han tenido rencillas y nunca se han puesto de acuerdo para acabar con los problemas que en España han sucedido y están sucediendo, y eso es algo que desfavorece notablemente que desaparezcan los contratiempos. Considero que es importante que no existan diferencias entre ellos, y que deberían de dar cada uno un poco más de su parte, y no ser tan radicales, y bueno en este caso, es el PP el que no acepta la propuesta que el PSOE le ofrece. Me parece horrible que no lo acepten cuando saben que es necesaria una medida que contemple todas las posibilidades y diferencias existentes en nuestra sociedad hoy en día, y que deberían de estar haciendo todo lo posible para favorecer el mejoramiento de la crisis.
Ángel Gabilondo afirma que para el Gobierno es muy importante que el Partido Popular forme parte también de este Pacto Educativo, ya que pretenden hallar la estabilidad normativa y un plan que dé respuesta a la voluntad mayoritaria de los ciudadanos. Mientras los partidos que apoyan el Pacto afirman que es un proyecto que se centra en los aspectos más relevantes de la sociedad española, los miembros de los partidos oponentes afirman que se trata de un proyecto que recoge puntos muy generales, y que para que tuviera una buena vigencia, tendría que ser un pacto ambicioso y para reformar para mejorar, por lo que debería tener una líneas precisas que solucionaran por problemas endémicos la enseñanza española, y no les parece razonable que no se haga mención a ninguna otra lengua a parte de la española.
En este pacto se deja muy marcada la obligación de que cada Comunidad debe de adaptar sus sistemas educativos a los nuevos principios planteados en este Pacto Educativo, teniendo en cuenta las características de sus ciudadanos y del ambiente en el que se encuentra, al igual que después cada centro deberá practicar aquellas normativas que le benefician más.
España es un país en el que destaca el plurilingüismo, ya que tanto en Valencia, como en Cataluña, en el País Vasco, en Galicia, y en Asturias, se hablan lenguas diferentes, además del castellano, o español, que son el valenciano, el catalán, el vasco o euskera, el gallego y el asturiano respectivamente, y por ello, estas Comunidades tienen más poder cultural, ya que hablan su propia lengua y además el castellano (lengua del Estado español), lo que son comunidades bilingües.
Desde el punto de vista sociológico, el tema del plurilingüismo está provocando diferencias en la lengua, ya que los ciudadanos de cada comunidad cada vez utilizan menos el castellano para comunicarse con los demás. Por ejemplo, la asignatura de matemáticas en Cataluña se da en catalán, hecho que pone en peligro la vigencia del español en dichos territorios, ya que estos, incluso proponen sus propias leyes y pretenden formar parte de Europa de manera independiente, por lo menos, Cataluña y el País Vasco, lo que ha provocado muchas diferencias políticas, y por parte de una parte de los vascos (ETA), aberraciones humanas (asesinatos, bombas, etc.). es un tema tabú para la sociedad española, ya que estos han llegado hasta a matar por conseguir lo que quieren, sin embargo el gobierno vigente en cada momento, nunca han aceptado esa división, por lo que ETA sigue matando, y los españoles seguimos pensando en lo que quieren y en si merece la pena todo esto, o por lo menos yo es lo que pienso.
Cuando hablamos de otras lenguas pertenecientes a la cultura de España, pensamos que a nosotros no nos pueden hablar en sus lenguas respectivas, porque somos españoles. Esta estrechez de miradas es muy común en los españoles, ya que aunque se piense que cada uno es libre de comunicarse en la lengua que quiera, si se trata de una conversación entre ellos y nosotros, entonces que hablen en español. Bajo mi punto de vista, me parece una “rabieta de niños pequeños”, ya que nos da igual lo que hagan los demás, pero si tiene que ver con nosotros que se adapten los demás, eso para mí, es comodidad y pocas ganas de aprender, porque encima que poseemos una cultura rica en valores, no los aprovechamos y aprendemos todos de ellos. Sé que es difícil aprender cada una de las segundas lenguas que hay en España, pero por lo menos una debería de ser opcional o algo en los centros educativos de las demás Comunidades Autónomas, porque considero que sería una medida para conocer su punto de vista, y comprenderle un poco, y no que con ello, nos estamos creando imágenes erróneas de los demás.
Tengo familia catalana y amigos, y he de decir que en Andalucía por ejemplo, los Catalanes están muy mal valorados, la gente les tiene un poco de manía, y creo que eso no es conveniente, ni por una parte ni por otra, somos españoles y debemos comportarnos conforme a nuestras creencias, se tolerantes y no tener prejuicios por aquellos que luchan por lo que quieren igual que todos, aunque las medidas que han llegado a tomar algunos vascos no son las adecuadas, eso ya es algo muy excesivo. Se crea un principio de dominio- sumisión entre Cataluña y Andalucía, por ejemplo, ya que a vistas de los demás, los catalanes son muy trabajadores y tacaños, y los andaluces son uno vagos y unos juerguistas, por lo que se crean famas que no corresponden, porque tanto en una como en otra hay personas que son muy trabajadoras, otras que no lo son tanto, y los tacaños son cada vez más habituales en todas las comunidades, al igual que los juerguistas, porque en todos lados hay fiesta, por algo somos uno de los países que más permiten el alcohol en las calles y en los jóvenes.
En España, se han ido creando a lo largo de la historia, diferentes visiones de la población de cada una de las Comunidades, lo que han producido malos entendidos entre unos y otros. Es una situación que nosotros, el pueblo, hemos creado y que somos nosotros los que tenemos que acabar con esos estereotipos que hemos creado, por lo que favorecería el entendimiento de todos y la calidad en las relaciones sociales.
En los últimos años, dos Comunidades Autónomas han legislado de forma diferente a la ley impuesta, y ahora son los partidos políticos de estas, los que está diciendo que en este país hay diecisiete sistemas educativos diferentes, por lo que ahondan en las diferencias, es decir, se quejan de que existen diferencias y quieren que eso cambie, pero luego son ellos mismos los que dan pie a eso.
Como conclusión a unos puntos señalados anteriormente, en este Pacto Educativo se pretende realizar una reforma de la ESO, donde el cuarto curso sería orientador y en primero y segundo, algunas materias podrían estar agrupadas en una sola; mientras que en el Bachillerato, se mantiene la propuesta de hacer alguna asignatura vía internet. Los profesores, por otra parte, tengan estatuto profesional propio antes de fin de año, y que estos puedan seguir jubilándose si quieren de manera anticipada. Sin olvidar, que por primera vez, el Gobierno incorpora una previsión económica, en la que declara que invertirá en educación, en los próximos tres años, más de mil quinientos millones de euros.
En el Pacto Educativo, por lo tanto, se trata el tema clave de la escuela pública y concertada (privada y subvencionada), donde se presentan unos desacuerdos entre los partidos políticos, ya que unos defienden que debe ser la educación pública la base del sistema educativo, como el PSOE, y otros, como el PP, que la base de este sistema se encuentre en la educación concertada. Los sindicatos y sectores de izquierda niegan la posibilidad de privatizar la educación en España y reclaman que la educación concertada escolarice al porcentaje de alumnos que les corresponde, ya que atienden al 26% del total del alumnado, y al 14% de alumnos inmigrantes, mientras que en la pública, estudian el 67% de todos los estudiantes y el 82% de los inmigrantes. Y ya no sólo se trata de los inmigrantes, sino que también estos alegan que la educación concertada seleccionar a su alumnado, dejando fuera a los más desfavorecidos dentro del ámbito socioeconómico, provocando así que la educación pública sea más difícil.
Lo que la educación concertada exige es que si tiene demanda de plazas y solicita una subvención a las administraciones, estas se la den, asegurando que estas dejarían de cobrar las cuotas a los padres, si las subvenciones se ajustaran más al coste real de la educación, y por lo tanto, niega que seleccionen a sus alumnos.
Con el Pacto, se pretende dar subvenciones tanto a la pública como a la privada, para de ambas reciban la financiación necesaria para llevar a cabo la enseñanza, sin embargo, se piensa que aún dando la misma cantidad a ambos sectores, el concertado seguirá cobrando las cuotas mensuales a los padres. Yo personalmente no estoy de acuerdo con la aplicación de enseñanzas privadas, ya que eso es un signo que connota clasificación y discriminaciones, ya que sólo acceden a ella aquellas personas que según los profesionales en este ámbito, cumplen las características de las normas establecidas en dichos centros. Y tampoco me parece conveniente que exijan derechos que ellos mismos, con sus acciones, provocan esa ausencia, ya que si acogen a un tanto por ciento que no supera lo establecido, y deja a la educación pública con todos aquellos que ella no ha admitido, pues esta se ve perjudicada y desfavorecida. Si esta estuviera cumpliendo con todos los principios, y pidiera dicha subvención para la enseñanza de sus alumnos, al igual que en la pública, pues me parecería lo más lógico, ya que todos tienen los mismos derechos.
Otra clave sobre el Pacto, es que para el PP es necesario producir contenidos mucho más parecidos en todas las comunidades, ya que rechazan la idea de que exista un sistema educativo diferente por cada Comunidad Autónoma, y además, reclama garantizar la enseñanza del castellano en todo el país, lo que provoca enfrentamientos con los partidos nacionalistas, en especial, con los catalanes, ya que choca frontalmente con su modelo de inmersión lingüística. Aunque otros sectores, como el PSOE, la Asociación Laica de Padres (CEAPA) o CCOO, aseguran que lo realmente importante del sistema educativo es que la escuela pública sea fuerte, lo que contradice a la debilidad que inicialmente se mostraba de las escuelas públicas, al hablar de las subvenciones.
El Estatuto Docente es el punto fundamental para que los sindicatos firmen un pacto, pero sobretodo, la clave se encuentra en la jubilación voluntaria anticipada. A partir de los años noventa, los docentes empezaron a jubilarse a los 60 años, pero ahora con la nueva propuesta educativa del Gobierno, se ha vuelto a aumentar hasta los 65 o 67 años, ya que se pretende asegurar el futuro de las pensiones en España, y por ello el acuerdo se verá afectado también, debido al aumento de la edad de la jubilación.
Por otra parte, todos los sectores están de acuerdo de que el encargado de hacer que mejore la educación, es el profesorado, por lo que se pretende mejorar sus condiciones, su formación inicial y continua, y conseguir también así, el prestigio social perdido anteriormente. La mayoría de los sindicatos reclaman, lo que en su día empezó pidiendo ANPE, que se vea al profesor como una figura de autoridad pública en el Estado español, como ya ocurre en la Comunidad de Madrid; y que los profesores sean evaluados para medir sus capacidades.
El PP, los sectores cercanos y muchos profesores con diferentes afinidades ideológicas, insisten en que la ley educativa que aprobó el Gobierno socialista en los años noventa, la LOGSE, es la causante de los males educativos que se han producido en España, y así mismo, rechazan lo excesos pedagógicos que acabaron con los valores clásicos, como el esfuerzo, llegando a la situación de catástrofe actual. En el otro lado, el PSOE, aún reconociendo los problemas anteriormente, responde que no existe desastre alguno, y que se han producidos avances en la educación española en las últimas décadas, empezando por el aumento de la escolarización obligatoria, hasta los 16 años.
España está por debajo de la media de la Unión Europea en financiación para el gasto educativo, y con el Pacto, se propone alcanzar la media europea en el 2015, el 5,4% del PIB, el cuál ahora se encuentra rondando el 4,92%. Y el PP dice que en este contexto de crisis y de un PIB bajo, con mantener el nivel actual de gasto, se alcanzaría el objetivo sin aumento de los presupuestos. Sin embargo, en cualquier caso, el esfuerzo tiene que darse tanto por parte de las comunidades, como del Gobierno, aunque la inmensa mayoría del gasto educativo se lleva a cabo por dichas comunidades, mientras que el Gobierno tiene más margen de actuación.
En mi opinión, considero que la intención del Gobierno a mejorar la media con relación a Europa, me parece muy lógica y que debe ser acatada por todos, ya que si se ha decidido eso, es por el bienestar de España y por no quedar atrás en las comparaciones, por ello no entiendo porqué el PP se opone también a esta medida, y no me parece como excusa mencionar la crisis, ya que si se consigue el nivel que se requiere, se van a aumentar las posibilidades de acabar con ella.
Además de las medidas que proponen unos y otros, como más plazas públicas de educación infantil (hasta tres años), más refuerzos educativos tempranos, flexibilización del sistema para que nadie se quede descolgado en caminos sin salida, el fomento de la exigencia, el mérito, el esfuerzo y por último, la excelencia, una de las propuestas más concretas ha sido la de hacer un Bachillerato de tres años, en lugar de los dos actuales.
Distintos colectivos, a derecha e izquierda, lo reclaman, y mientras unos pretenden hacer que cuarto de la Educación Secundaria sea un curso orientativo, relacionado con el Bachillerato y con la Formación Profesional (PSOE), el PP propone quitar un curso de la ESO, concretamente cuarto, para dárselo al Bachillerato. Sin embargo, el PSOE no está dispuesto a reducir la formación común, ya que si lo hiciera estaría reduciendo la equidad y la igualdad de oportunidades, por lo que la idea que ha dado el ministerio es, hacer el último curso de la ESO más orientador, en el que el alumno debe elegir entre una vía orientada a la FP, y otra al Bachillerato, aunque dicha decisión no condicionará al alumno a la hora de elegir sus estudios después, ya que si por ejemplo un alumno decidiera recibir orientación sobre el Bachillerato, y luego no se anima a hacerlo, pues podría acceder aún así al ciclo formativo medio que quisiera. En dicho curso orientativo, los alumnos seguirían teniendo las asignaturas comunes y además las específicas, según la orientación que decidieran tener.
La crisis económica hace que los partidos políticos estén enfrentados y eso, por lo tanto, no beneficia al pacto. Todos los grupos políticos y actores educativos son conscientes de que hay una creciente presión social, a favor de que haya acuerdos y que la educación sea un foco importante en ellos.
En relación a los temas dados en este cuatrimestre, he de decir que este nuevo proyecto que el Gobierno piensa llevar a cabo para asegurar la educación, forma parte de esa primera función educativa, la de Guardia y custodia de los más jóvenes, donde se pretende hacer que estos se instruyan dentro del saber y del conocimiento, evitando así que los niveles sociales, políticos, económicos, etc. se vean afectados por las malas decisiones que nosotros, los jóvenes, a veces tomamos. Por lo tanto, los adultos lo que pretenden es que los más jóvenes, al tener más oportunidades, hagamos aquello que ellos, por falta de medios, no pudieron conseguir.
La formación hoy en día es primordial para todo aquello que deseemos conseguir, y por ello, la formación académica es tan valiosa mundialmente, sólo que la juventud no sabe valorar lo que realmente eso requiere y nos beneficia. Hay una intención de integración de la población española a nivel mundial, y de una superación dentro de la misma, de la educación y de las posibilidades de esta, por lo que el Gobierno establece un Pacto Educativo, en el que el niño sepa desde pequeños, que su camino debe ser la formación, y que dentro de sus ámbitos, ya sean familiares, sociales o económicos, influyan de manera positiva para que aumente el índice de personas con titulaciones.
Es una medida que contempla una evolución y que hace que los jóvenes no tomemos decisiones precipitadas, además de darnos los conocimientos necesarios para saber afrontar los nuevos acontecimientos que se nos presenten.
La Escuela Clásica fue la encargada de poner en práctica un conjunto de ideas que se refirieran a la estructuración de la organización, por lo tanto, la teoría clásica fundamenta la moderna, y varios de sus conceptos todavía se utilizan con una aproximación inicial teórica. Además, se toma más conciencia en el poder institucional, lo que provocó conflictos con aquellos que desean un enfoque individual o una participación democrática, cosa que hoy en día no ocurre, ya que estamos en un país en el que se puede decidir las ideologías, las creencias, las posiciones, etc.
La Escuela Reproduccionista contribuyó a las desigualdades sociales, y se defendió de las acusaciones recibidas, alegando que ella no tuvo nada que ver en la aparición de dichas desigualdades, ni tampoco en los cambios que se produjeron. Por lo tanto, la función de la escuela es generar desigualdades sociales, donde se dice que el pensamiento del profesorado, de los alumnos y de los familiares son movimientos sociales, que no tienen ninguna base científica, y que pretenden superar dichas desigualdades. De manera indirecta, puede que este tipo de escuela, influya sobre el Pacto Educativo, ya que se cometen millares de discriminaciones hacia las personas por ser diferentes a todo lo demás, y con este, lo que se pretende es hacer desaparecer los prejuicios que se forman.
Y como conclusión a este trabajo, de he decir que apoyo al Pacto educativo, ya que considero que pretende establecer la igualdad de oportunidades, y que ha sido diseñado para hacer mejorar el estado de España, y creo que sólo por ello, deberíamos todos de apoyar dicho proyecto, aunque sus cambios sean más o menos favorables para uno o para otros.
DIARIO DE CAMPO
La información que he utilizado para este trabajo la he encontrado en la página web del periódico “El País”, www.elpais.com, además de buscar en Google y descargarme un artículo de la página www.educación.es.
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